La licencia comercial, otorgada por la municipalidad, permite a una empresa operar legalmente dentro de su jurisdicción, garantizando el cumplimiento de leyes y normas. Este documento también aporta credibilidad y formalidad a la empresa. La patente, por su parte, es el derecho que se paga por ejercer una actividad lucrativa.
Algunos requisitos: Estar al día con las obligaciones municipales, contar con la aprobación de uso de suelo, permiso del Ministerio de Salud para operar, póliza vigente del Instituto Nacional de Seguros (INS), estar inscrito ante el Ministerio de Hacienda.
El pago de la patente se justifica como un derecho exigido por la municipalidad debido a la naturaleza lucrativa de la actividad comercial, se realiza fiscalización e inspecciones de locales tanto de Patentes comerciales, así como de Comerciales de expendido de bebidas alcohólicas.
